Últimamente parece que tenemos predilección por la atención a pacientes politraumatizados.
Se trata de un varón de 39 años que en un intento de autolisis por precipitación desde altura, sufrió una fractura pélvica con fractura compleja del sacro y diástasis púbica. Además presentaba fractura-estallido de L1, fractura abierta compleja del tobillo derecho, fractura de tobillo izquierdo y fractura de múltiples arcos costales.
Trasladado a urgencias por los servicios de emergencias en UCI móvil, el paciente presenta cifras de tensión arterial de 60/40 mm Hg, escasa respuesta de conciencia y frialdad de extremidades.
En urgencias se trata inicialmente con intubación, aporte de hemoderivados y sueros y compresión pélvica con sábana alrededor de la pelvis.
Se traslada de urgencia al quirófano donde se realiza estabilización pélvica con fijador externo y tornillo sacro-iliaco en lado izquierdo. Fijador externo en tobillo derecho y férula posterior en tobillo izquierdo.
Posteriormente fue trasladado a UCI donde permanece estable hemodinámicamente a la espera de nuevas cirugías para estabilizar la columna y sintetizar el tobillo derecho.
Un mes después de la primera intervención de urgencias, el paciente fue retirado el fijador externo pélvico y realizada osteosíntesis de la sínfisis púbica con placa tipo Matta de 4 tornillos.
En el mismo proceso se realizó una artrodesis T12-L1 para la estabilización de la fractura de L1.